Por iniciativa de sus tutores y del Servicio Nacional de Reinserción Social Juvenil (SRJ), tanto adolescentes están en investigación por alguna infracción a la ley, como jóvenes sancionados por la comisión de un delito, participan de distintos talleres al interior de sus casas, en el centro de cumplimiento de internación provisoria (IP) e internación en régimen cerrado (IRC), ubicado en Las Compañías.
El objetivo es fortalecer la rutina durante la época estival y aprender diversas técnicas, para la elaboración de productos que luego son puestos a la venta. Por esta razón, en el acceso principal del recinto se montó una muestra con los trabajos realizados, los cuales pudieron ser adquiridos por quienes asisten diariamente.
La directora regional, Loreto Rebolledo, visitó la muestra, pudiendo apreciar el trabajo y el talento de los jóvenes que se encuentran en el centro. “Me parece una buena señal de reinserción reconocer que, detrás de cada joven, hay una persona que tiene una multiplicidad de habilidades para desarrollar. Y, desde ahí, el arte y los talleres que se están llevando a cabo, les permiten descubrir talentos ocultos, capacidades y habilidades pro sociales. De esta manera, no sólo el arte, sino la posibilidad de generar un oficio, les ayudan a vislumbrar una estrategia de generación de ingresos. Porque la muestra no es solamente para exhibir lo que han aprendido, sino que es una posibilidad para mostrar que, mediante estas acciones que favorecen su reinserción, ellos pueden generar dinero”.
El joven B.G.R (18) comentó que participó en la fabricación de espejos con mosaicos. “Hice dos espejos, de varios colores. Me quedaron bien bonitos, porque uno puede hacerles diseño o incluso personalizarlos a gusto del cliente, ahora estoy haciendo uno con una rosa. Este tipo de talleres son buenos, porque nos ayudan monetariamente y podemos ayudar a nuestras familias. Me gustaría que la exposición fuera un día en especial y que nosotros también podamos ayudar a vender los productos”.
Los talleres desarrollados al interior de las casas, ejecutados por los tutores Alejandro Montoya, Karina Saavedra y Patricio Guajardo, corresponden a resina, decoupage vintage, mimbre chino, mosaico, lámparas, macramé, mix media textil y velas. Alejandro Montoya, a cargo del taller de lámparas y mosaicos, destaca que la disposición de los jóvenes para la realización de estos productos ha sido “súper buena, ellos agradecen mucho, ya que se les da la posibilidad de ocupar sus tiempos de ocio en algo productivo y además pueden recibir un dinero que les permite aportar a sus familias o para sus gastos personales”.
En tanto, la directora regional, Loreto Rebolledo, valora la iniciativa de los tutores “porque detrás de los jóvenes, hay funcionarios que identifican, levantan necesidades y van generando estos espacios. El desafío que tenemos a corto plazo es mantenerlos de forma más permanente y mostrarlos hacia afuera, para que los jóvenes vayan dándose cuenta que hay un reconocimiento social y que no queda solamente dentro de los muros del centro. La idea es llevar estas muestras al circuito judicial, a la Dirección Regional, a plazas de justicia, con los organismos acreditados, es decir, ir mostrando y vendiendo estos productos que significan una generación de ingresos para los jóvenes”.